¿Un gato “maldijo” a la Selección de Brasil?
El pésimo momento de la “Canarinha” se presta a un sinfín de análisis, pero una teoría que roza lo paranormal va ganando fuerza a medida que el panorama brasileño se torna cada vez más complicado.
El pasado 7 de diciembre de 2022, Brasil se preparaba para enfrentar a Croacia por los Cuartos de Final del Mundial de Qatar. En el marco de los preparativos, se daría una conferencia de prensa para hablar en relación al duelo.
Sin embargo, un curioso hecho quedó grabado en la memoria de varios: un gato se encontraba en la mesa en la cual Vinicius Jr comparecía ante los medios de prensa. El felino fue removido de forma poco gentil por un miembro de la delegación brasileña y desde ahí, algo cambió en el “Scratch”.
Dos días más tarde comenzaría la supiesta maldición: la selección entonces dirigida por Tité caería ante los croatas en tanda de penales, tras igualar a uno en el tiempo normal y el alargue; en un partido en el que la “Verdeamarelha” fue superior en casi todo el trámite.
Una vez finalizado el Mundial, la mala racha brasileña continuaría; teniendo su punto máximo en los últimos dos combos de las Eliminatorias; en los cuales el elenco de la tierra de la samba lograría solamente sumar un punto de doce posibles, empatando apenas un partido y perdiendo tres al hilo. Entre esas derrotas, se encuentra la primera caída en condición de local por duelos clasificatorios a Copa del Mundo en toda su historia (0-1 contra Argentina).
Los pentacampeones mundiales disputaron un total de diez partidos posteriores al incidente con el animal de siete vidas, teniendo como balance tres victorias, un empate y seis derrotas.
En las redes sociales se ha viralizado la teoría de que el destrato hacia el gato qatarí puede ser considerado como el inicio de la pésima seguidilla de resultados que ha tenido la Selección de Brasil en sus últimas actuaciones, a pesar de contar con un plantel plagado de estrellas y un juego que no desentona.
Mala suerte o coincidencia, pero lo concreto es que Brasil atraviesa uno de sus peores momentos en los últimos años y al menos por ahora, pocos argumentos explican la debacle de forma tan repentina.